lunes, 25 de octubre de 2010

Mi génesis

Hoy lunes, 25 de octubre, luego de un día de trabajo y compromisos, anhelaba llegar a mi casa para sentarme a escribirte. Comenzaré transportando mis recuerdos, cuando era una niña y mis padres me enviaron a Puerto Rico, a pasar un tiempo con mis abuelos. wow, que tiempos, yo era la nena que llegó de New York, con mis  botas rojas de invierno que las usaba para caminar por el barro.  Mis tíos y abuelos me complacían  demasiado. Mi abuelo, wow, yo su nieta querida, me llevaba con el  a todos los lugares.  Me protegía mucho; hoy a mis 50', lo extraño mucho, nada como un abuelo.  Abuela?, claro también la extraño, pero es que mi abuelo era cosa aparte.  Cada vez que el se sentaba a la mesa a comer, comenzaba a repartir de su comida, que lindo, eso lo aprendí de el. Era el carpintero del barrio, yo diría hoy día, el arquitecto; cuantas casas construyó. Abuelo querido, te extraño. 

Estudié desde el primer grado hasta el grado doce con la misma clase graduanda, cosa que hoy no es muy común, pero en mi época en el pueblo donde me crié, solamente existía una escuela elemental urbana, una intermedia y una superior, eso permitió estudiar y crecer con los mismos compañeros.  Hoy, 32 años después, disfruto cada reencuentro que hacemos, ya sea un pasadIa o una reunión,   como nos divertimos.  

Mi primera ilusión amorosa, fue a los 12 años de edad, no es que era muy precoz, no,  es sencillamente que así es la vida.  Era un chico de ojos azules, alto,  buen muchacho, pero mis padres me lo espantaron y hoy comprendo, que ellos tenían razón,  era una niña en la transición hacia la adolescencia.   Pero ese fue el comienzo, de ver estrellitas, ver mariposas, sentir como te palpita el corazón tan aceleradamente, ja,ja,ja. Hoy, a mis cincuenta, sigo viendo mariposas, estrellitas, o mas bien, diría la constelación completa y las palpitaciones del corazón, se sienten más fuertes que un motor de autos de carreras.  La diferencia del ayer al  hoy, la experiencia, pero el resultado al final es el mismo, lo disfrutas, lo vives, lo sueñas, pero ese príncipe que esperas, si, ese mismo, te hace vivir la ilusión de la primera vez, donde todo es color de rosa. 

Vivir la vida desde el punto de vista romántico, es hermosa. Que ilusiones tiene una mujer a sus 50'?,  eso te lo diré en la próxima pagina de mi diario, sígueme...linda vida.


2 comentarios:

  1. Bello primita no se por que pero de pronto me vi plasmada en tu diario. Sabes yo también extraño mucho a abuelo y por supuesto a abuela pero más a abuelo el era otra cosa; el era especial. Te amo mucho Isabelle...

    ResponderEliminar