30 de octubre, temprano en la mañana, quiero compartir contigo esta historia. Dicen que un rayo no cae dos veces en el mismo lugar, pero si, cae dos y hasta tres. Cuantas relaciones has tenido de amistad?, me imagino que varias; yo si, tengo muchos amigos. Te contaré de este amigo, es cantante, profesional, manteníamos excelentes momentos conversando de cualquier tema. Con él, pude despedir varias noches y recibir el nuevo día frente al mar sin ningún otro acercamiento que el de un buen amigo, hasta que un día todo surgió sin planificarlo y ahí perdí a mi amigo para convertirlo en el amante y luego en historia.
El rayo volvió a caer en el mismo lugar, con la diferencia que el segundo fue más fuerte. Este amigo me levantaba en la mañana con una llamada telefónica y me dormía en las noches con su música preferida que luego convertí en la mía. Los interés comunes eran demasiados hasta llegar el momento en que tu vida gira a través de esa persona y sin planificarlo, perdí a mi amigo por el amante. A quién extraño?, a mi amigo.
Un amante, se consigue en cualquier lugar, pero un amigo, no. En el momento en que pones en riesgo esa amistad por seguir el instinto animal, pones en riesgo también a tu corazón. Habrá valido la pena?, quién era más importante, mi amigo o mi amante?. Con tu amigo, creas una dependencia emocional, con el hablas todos los días, compartes interés comunes, aventuras, ríes, lloras y cuando pierdes todo eso, es como cuando un niño pierde su juguete.
Volver a encontrar a ese amigo, solo el tiempo será el testigo.
Totalmente cierto siempre un verdadero amigo es mucho mejor que un gran amante!!!
ResponderEliminar